Si estás pensando en empezar tu formación para ser docente, porque te apasiona la enseñanza, tienes que saber bien qué es lo que debes hacer para lograrlo, y conocer cuáles son las tareas que se deben realizar en este trabajo.
Cada vez más personas tienen interés en la docencia virtual, porque con este tipo de trabajo pueden transmitir sus conocimientos y cambiar positivamente la vida de otras personas.
En este artículo te explicaremos cuáles son las fortalezas de un docente, y te hablaremos de todo lo que debes tener en cuenta antes de empezar a dar clases.
¿Cuál es el trabajo de un docente?
Los docentes cumplen con una serie de tareas y responsabilidades muy amplias, todas vinculadas a la enseñanza. Su función principal es servir de guía para los estudiantes, y transmitirles conocimientos sobre diferentes temas.
Para hacerlo, bien sea que se trate de un modelo de docencia virtual, o de uno tradicional, necesitan tener habilidades pedagógicas que les permitan conectar con los estudiantes, y utilizar algunas estrategias que faciliten el aprendizaje.
Se trata de un trabajo sumamente importante, porque los docentes tienen el poder de transformar la vida de las personas y prepararlas para el mundo laboral. Además, las personas con formación docente no solo cumplen con el propósito de transmitir conocimientos, si no que también pueden inculcar valores y habilidades blandas a sus estudiantes.
Requisitos de formación para ser docente
Los requisitos de formación para ser docente varían en función del país y del nivel educativo en el que se quiera dar clases. Sin embargo, lo principal es tener un título en educación que certifique que la persona cuenta con las habilidades que se necesitan para enseñar.
Estos títulos se consiguen al cursar una carrera en una institución de educación superior, y de completar un programa de estudios con componente docente. Asimismo, se pueden hacer diferentes especializaciones para cubrir áreas de educación primaria, secundaria o universitaria.
Quienes se dedican a la docencia virtual, además, tienen que realizar capacitaciones que les permitan adaptarse a la virtualidad y tener competencias para enseñar en línea.
En algunos casos, también es necesario contar práctica como docente para asumir la posición, por lo que se suelen hacer prácticas profesionales supervisadas, con el propósito de evaluar la capacidad que tiene el docente para enfrentarse a un determinado tipo de situación.
Importancia de las habilidades pedagógicas para ser docente
Para hablar de las fortalezas de un docente, tenemos que empezar por las habilidades pedagógicas. Ya que gracias a ellas es que puede identificar con facilidad cuáles son los objetivos de aprendizaje, seleccionar contenidos relevantes, y transmitir los conocimientos de forma efectiva.
En la educación la pedagogía lo es todo, por ello, es tan importante. Un buen docente tiene que saber qué estrategias utilizar para adaptar los contenidos a las necesidades particulares de cada estudiante, y encontrar herramientas que le permitan evaluar si se están cumpliendo los objetivos de aprendizaje.
Este es un punto que se suele tratar en la formación docente, ya que con la capacitación adecuada, cualquier persona puede desarrollar este tipo de habilidades. Lo más importante es tener vocación y tener un interés genuino por la enseñanza.
Métodos de enseñanza y aprendizaje
Existen una infinidad de métodos de enseñanza y aprendizaje, y cada uno de ellos parte de un enfoque que busca mejorar el proceso educativo y ayudar a que los conocimientos se transmitan de forma efectiva.
Uno de los métodos más utilizados en todo el mundo es el método de enseñanza activo, que involucra a los estudiantes en el aprendizaje, en vez de limitarlos a escuchar y tomar notas de lo que se dice.
De igual manera, podemos hablar del método de enseñanza basado en problemas, a través del cual los estudiantes reciben un problema a resolver, y son invitados a realizar una investigación que les permita encontrar una solución.
Hay muchos tipos de docentes, por lo que las técnicas, las estrategias y el enfoque desde el que se parte puede variar mucho. Además, es importante tener presente que con el desarrollo de las nuevas tecnologías, los modelos de aprendizaje están cambiando, y los enfoques de docencia virtual están ganando cada vez más terreno.
Uso de los recursos tecnológicos en la enseñanza
El campo de la educación ha cambiado radicalmente gracias al uso de recursos tecnológicos. Ahora, más que en cualquier otro periodo de la historia, las personas tienen acceso a recursos para formarse académica y profesionalmente, y el trabajo docente se ha adaptado al uso de dispositivos, software y plataformas educativas.
Plataformas como Coderhouse han logrado que el aprendizaje sea algo más atractivo para las personas, y que sea muy sencillo obtener conocimientos sobre diferentes áreas. Los docentes siguen teniendo un rol central en la formación de los estudiantes, pero ahora cuentan con muchas más herramientas para hacer su trabajo.
En tiempos donde los saberes cambian tanto y tan rápido, mientras todos aprendemos a ponernos al día, la educación efectiva se ha convertido en una carrera contra el tiempo para alcanzar al presente.
Apreciar la educación, y generar deseo en formarnos, ya no se trata de recibir información. Se va a tratar de conocer y contextualizar toda la información que podemos conseguir en cualquier parte; y crear conocimientos. El conocer implica entender las causas de un fenómeno o método, con el objetivo de crear criterios; y más adelante implementar estos conocimientos de la manera más asertiva y efectiva posible.
Pero, ¿dónde queda el rol del docente?, y más importante aún, ¿dónde queda la motivación de convertirse en docente para todos los excelentes profesionales que innovan el mercado en el día a día?
El ser docente no es solo ser un profesional con pedagogía. El ser docente llega, desde un primer momento, cuando toda nuestra experiencia laboral le facilita el trabajo a las demás personas de nuestro equipo.
Y más allá, ¿qué pasa ahora cuando el reto de la educación se nos presenta a la distancia? Así como hay mucho por dominar para sentirse cómodo en los zapatos de la docencia, también hay muchas virtudes que llevarán a cualquier profesional, ejerciendo en cualquier disciplina, mil pasos más allá. Estas virtudes son invaluables en el mercado laboral, de esta manera, impulsando nuestro capital humano más allá.
Acá les dejamos un pequeño abreboca de aquellos músculos profesionales que se ejercitan en el ser docente.
Principales características de un buen docente
Tener formación docente no es suficiente para enseñar de forma efectiva, las personas que se dedican a la educación deben tener una serie de características muy amplias, que abarcan mucho más allá de la simple transmisión de información.
Para ayudarte a entender cómo obtener todas las fortalezas de un docente, te dejamos un pequeño listado de características positivas.
Es un modelo a seguir
Role Model. En el ámbito actual, un role model es una persona a seguir. Sabe comunicarse tan asertivamente que no solo enseña y lidera, inspira. El usar nuestra experiencia para guiar, y crear pasión en otros, se desarrolla día a día en el aula. Aprender a conectar con colegas, o futuros colegas, a través del amor por una profesión; cambia lo que se percibe de nosotros mismos. Transformar nuestras vivencias profesionales en ejemplo de resiliencia y crecimiento cultiva en las futuras generaciones lo necesario para perseverar y seguir aprendiendo.
Intenta analizar cuáles son aquellos elementos que te apasionan sobre tu profesión. Profundiza en ellos y, si es posible, capacítate más. Fórmate como experto en las cosas que amas de la carrera que elegiste y no te guardes de ninguna oportunidad para seguir aprendiendo sobre lo mismo. No hay mejor forma de convertirte en role model, que amar ser estudiante.
Logra que el aprendizaje sea divertido
La creatividad y el dinamismo son elementos claves en el aprendizaje, porque impactan en la motivación y el interés de los estudiantes. Para que las personas disfruten de aprender es necesario contar con alguien que les pueda mostrar que el contenido educativo también puede ser divertido.
- Dinamismo. Aprender a ser dinámico no es solo una herramienta para el aula. Si bien lograr jugar con la curva emocional del momento es imprescindible para manejar un salón de clases y lograr aquellos momentos clave donde el aprendizaje se traduce en conocimientos; ser dinámicos en nuestra vida profesional implica estar listos para la acción. Entender que todos los momentos de un proyecto son claves para lograr el cometido, lleva a los colaboradores de una empresa a conocer su producto y aprovechar el tiempo, sin agotarse; pero emocionados en cada paso.
- Practica contando historias. Esto será fundamental, no solo para abstraer información, también para entender los diferentes focos emocionales de los eventos. Contar una historia siendo el director de la misma, te dará la voluntad de expresar aquello que quieres decir de mil maneras sin necesidad de cambiar las palabras. Esto nos ayudará a ejercitar el poder identificar y proyectar momentos claves, ¡y podremos proyectar como momento clave aquel que nosotros queramos!
- Flexibilidad. Es labor del personal académico de cada institución expresar las consignas mínimas sobre el planteo metodológico y de contenidos sobre el curso que se busca impartir. Sin embargo, el ejercicio docente nos enseña a que solo conociendo a nuestro público, podremos impartir conocimiento. Por ende, la tarea de conocer a nuestros estudiantes, equipo de trabajo, usuarios, público en general; nos arrastra también a la tarea de estar permeables al cambio en todo momento, así como también conocer la labor de nuestro rubro y estar seguros de hacia qué dirección virar.
- Cambia de rutina tantas veces como puedas. Pequeñas cosas nos hacen permeables al cambio, pero lo que más causa un efecto, es estar constantemente buscando el cambio. Aprovecha para hacer cambios en las cosas que sí puedes cambiar, y surfearás con placer aquellos eventos que tuvieron que cambiar y no lo esperabas.
Tiene habilidades para la investigación
Investigador. Ser docente viene de la mano con mantenerse actualizado; y no existe mejor cualidad para cualquier profesional que estar a la vanguardia en lo que respecta a su campo. El ejercicio de investigar se estandariza en la actualidad debido a la rapidez con la que las tecnologías cambian. De la misma forma funcionan la educación y las diferentes disciplinas del mercado, así como también existe una necesidad de renovar e iterar sobre nuestras habilidades blandas. ¡Un profesional en vanguardia será role model, dinámico y flexible a la vez!
* Aunque la recomendación para este punto parezca obvia, ser investigador no solo se ejercita investigando sobre nuestras profesiones. Es importante también aplicar investigación a otras cosas. Investiga sobre diferentes formas de hacer lo mismo, y experimenta con ellas de manera metodológica. Por ejemplo, investiga diferentes maneras de organizar tus tareas del día y utiliza una diferente cada semana; documenta hallazgos y retos. Esto te preparará para el momento en el que necesites investigar de lleno sobre un tema más académico.
Ser docente: algunasonclusión
La docencia es una actividad muy importante para el bienestar de la sociedad, porque a través de ella se transmiten conocimientos técnicos que ayudan a las personas a insertarse en el mercado laboral.
Las personas que se dedican a la docencia suelen tener una vocación muy grande por lo que hacen, y se preocupan por el desarrollo de sus estudiantes. Su labor también implica convertirse en una especie de guía o modelo a seguir, ya que muchas veces también transmiten valores y otros conocimientos necesarios para enfrentar los desafíos de la vida.
Ser docente es una vocación, pero, si estas habilidades te parecen valiosas como profesional, es el ejercicio perfecto para superarnos en el mercado y empezar a cotizar nuestros conocimientos en oro.
Aquella persona que sea capaz de convertir información en conocimiento; y jugar con esos conocimientos en diferentes contextos (o descontextualizarlos totalmente para poder reciclarlos) estará un escalón más arriba en su profesión.
Entonces, ¿qué esperas para intentarlo? El dominio de nuestros conocimientos está en ser docente y cualquier persona con pasión por lo que hace, está lista para enseñar.
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